El ser humano ha sentido una fascinación por las flores desde su existencia. Nos comunicamos con flores desde antes de que existiera el lenguaje.
En esos momentos cuando estamos enamorados, tristes, enfermos o simplemente celebrando o despidiendo a la vida no existe mejor compañía que las flores. Las flores son portadoras de mensajes y de alegría ellas trasladan nuestro sentir de una forma sutil.
Hay momentos en la vida en que simplemente no nos salen las palabras, aunque tengamos tanto que decir y nuestros pensamientos fluyan, comunicarnos es un arte y se vuelve aún más complicado cuando queremos decir tantas cosas a las personas que amamos y las emociones nos invaden.
Las flores son nobles por naturaleza y su nobleza permite trasladar de manera clara nuestros mensajes, nuestro sentir.
Cabe mencionar que todas hemos recibido una flor en nuestra primera cita y esa flor simplemente no lo dice todo y que decir en nuestros cumpleaños o aniversarios, cuando estamos tristes o felices, en los momentos más importantes de nuestra vida siempre están ahí acompañándonos y comunicando lo que sentimos.
Así son ellas, nos ayudan a comunicarnos de una manera sofisticada y silenciosa.
Por Monserrat Medina
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